Andrea Greppi

Si se tuviera que definir a Andrea en una sola palabra, la respuesta seguramente sería que es una tarea imposible, pues la chica es contradictoria desde sus entrañas consigo misma. Es, por un lado, muy femenina, risueña, leal y en general una buena amiga, pero muy agresiva cuando se le insulta, y muy orgullosa para pedir perdón. Puede llegar a golpear a alguien si se lo provocan. Con las chicas mantiene la distancia, pues se siente más cómoda con los hombres. Con éstos, actúa como una más del grupo al mismo tiempo que resalta por sus maneras de actuar y apariencia. No suele dirigir palabra alguna a aquellos que no le agradan, pues sabe que es un gasto innecesario de energía, y que lo más seguro es que en un momento se enojará y terminará arruinandose el día.
Es más lógica que emocional. No se deja llevar tan fácilmente por lo que su corazón le indique, y más bien se detiene a pensar en qué es lo que va a hacer.
Le gusta mucho llamar la atención, ser el centro y que todos la miren, lo cual a la larga descubrió que resulta ser un problema, pues con todos los ojos puestos encima no es fácil llevar la doble vida que lleva. Celosa en demasía, pero no suele exponerlo a nadie. Es celosa en especial con su hermano, con su chica y con su novio, en ese órden. Y no deja que nadie toque a su novio aunque a ella en realidad no le guste, pues es suyo y no puede serlo de alguien más.
Se contradice en ese sentido, pues ella misma no es fiel. Mas esto no se debe confundir con lealtad, ella dice, pues mientras puede engañar en una relación, jamás dejará de luchar por los motivos que ella cree correctos, con la gente que cree correcta, y es por eso que no dice nada sobre su homosexualidad, pues ella confía en que quizá es una etapa y con el tiempo aprenderá a sentir lo que siente por su "amante" pero por su novio. Eso es lo que de verdad desea.

• Giancarlo Greppi [auror | 49 años | padre]
  
• Melanie Stripes [ama de casa | 46 años | madre]
  
• Gustavo Greppi [reportero | 21 años | hermano mayor]
  
• Luca Greppi [estudiante | 16 años | gemelo]
  
• Natalia Greppi [estudiante | 13 años | hermana menor]
  
• Valentino Greppi [infante | 9 años | hermano menor]
  

Nacida un 29 de Agosto, en el seno de una familia con una economía modesta. Giancarlo era un joven italiano que había estado viviendo en Inglaterra desde los 10 años, un año antes de que le dieran la noticia de que, en verdad, no era una persona común y corriente, sino que era un mago. Los años pasaron, y se graduó como un Ravenclaw orgulloso, y no tardó en conseguir empleo como auror. Al mismo tiempo que desempeñaba un papel importante en el mundo mágico, mantenía contacto con el muggle porque era lo que había conocido una buena parte de su vida, y un día, mientras tomaba un café en un lugar común y corriente, conoció a Melanie, que resultaría ser el amor de su vida.
Meses después de salir con ella, decidió revelarle el secreto de que era en realidad un mago, y Melanie se consternó tanto por la confesión, que le pidió un tiempo para pensar las cosas. No tardó mucho en regresar a los brazos de Giancarlo, y al año de haberse conocido, se casaron. Después de 5 años de haber tenido al primogénito, nacieron Luca y Andrea; gemelos.
Andrea siempre fue muy femenina, pero también un poco agresiva; gustaba de hacer que sus hermanos jugaran con ella a lo que ella quisiera, y así lo hacían. Aunque Gustavo siempre fungió más como el niñero que como otro jugador más, mientras que Luca se prestaba para que Andrea jugara con su cabello, o le pusiera vestidos, o cualquier otra monada que hacen las niñas pequeñas. A los 3 años nació otra hermana, pero con el mismo carácter de Andrea, por lo que no supo jugar con otra que deseaba liderear y se aisló con Luca, a quien siempre podría ordenar cuanto quisiera, y con quien siempre podía contar.
El último nació 4 años después y, naturalmente, Andrea y Natalia se pelearon por él, hasta que un día llegaron a jalarse los cabellos y su madre tuvo que separarlas y reprender a Andrea, por ser la mayor. Desde ese momento creció un desprecio de ella hacia Natalia, y solo se relacionó con Luca, y a veces con el pequeño Valentino, cuando Natalia lo dejaba solo.
Cuando entró a Anfang con su hermano, se dolió, pues habían resultado en distintas casas. Él había sido sorteado en Hufflepuff y ella en Gryffindor; para colmo su hermano mayor tampoco estaba ahí, sino en Ravenclaw.
Claro, que no tardó mucho en hacer amigos, pues prefería esa familiar onda masculina que la femenina, pues solo había tenido la experiencia de su hermana menor y no había sido placentera.
En 3° grado, Natalia entró a la escuela también y fue sorteada en Gryffindor, lo cual fue como una pesadilla para Andrea, que se limitó a ignorarla y a desconocerla como hermana frente a los demás. El año siguiente, ya con solo un par de amigas hechas, comenzó a notar que algo andaba mal, pues ellas siempre andaban comentando que les gustaba tal o cuál chico y a ella no parecía tenerles ese tipo de interés. Más bien sentía todo eso que ellas decían por una sola chica por ahí, mas como lo consideró algo anormal, se lo calló.
La presión social hizo que en 5° se consiguiera un novio, con el cual se la pasaba de maravilla, mas no le gustaba nada, y cuando conoció lo que era un beso, no le pareció nada espectacular, pues fue como si presionara sus labios contra una manzana o una pared.
Lo habló una vez con su Luca, quien parecía tener el caso opuesto, pues a él no le interesaban las niñas, sino los chicos. Se sintió más aliviada, pero no se lo dijo a nadie más, por miedo a ser ridiculizada, y porque no quería que su novio le dejara.
Con el tiempo encontró a una chica a la que también le gustaban otras chicas, y experimentó con ella lo que era un beso de verdad, y el cariño de pareja. Guardaron lo suyo lejos de los demás, y Andrea se lo dijo solo a Luca. Continuó con su vida "normal", y ocultó la vida que añoraba desesperadamente.